LOS NOVIOS

Novios de principio a fin. Johanna Covas y Hans Hillenbrand. Esos tulipanes envueltos entre rojos azafrán y amarillos de delirios, que la novia arremolina entre su mano, le da una nota de surjencia a esta escena. Sólo nuestros augurios los acompañarán por siempre, sin querer decir que se quedarán solos. Nos congraciamos con Ustedes y les deseamos los mejores deseos en su vida futura. Como lo ven, estamos juntos y lo estaremos por siempre. FELICIDADES!!!

LOS NOVIOS Y LOS PAJECITOS

Los novios contornean a los pajecitos que los escoltan. No hay que olvidar lo mucho que los niños alumbran en un evento de esta dimensión. No hay que dejar de recordar la escencia de sus presencias, de sus sustancias divinas y prometedoras. No son simplemente buenas promesas ni tanto el hecho de que nos acarreen buenas suertes, no, creo que lo importante es que fuera de pontificar el ambiente con sus presencias inocentes, desapercibidas, nos dan aúreas de lucidez y nos indican sin despabilar, el futuro.

LAS FAMILIAS

Los Covas y los Hillenbrand exponen lo que llevan por dentro. Saquemos nuestras conclusiones y no dejemos que toda esta enjundia se pierda. El esplendor de la novia es demasiado elocuente y su belleza altiva honorifica a la abogada que por dentro transcurre. Se despide del arrullo del padre benefactor, Carlos Covas quien la recibe en su regazo. la Madre de la novia (Nubia Guzmán de Covas) se afianza al Padre, ostentando buenos oficios e irradiando sonrisas en todo el derredor. Sus hijos son felices (Carlos Hernando y Alberto Mario), solidarios y le sonrien a su hermana querida. No basta por tanto relatar lo que ocurre al lado del novio, en donde es sufiente ejemplificar las posturas llenas de enjundias y buenas intenciones de parte de la familia del novio.

ESTILOS Y ESTÉTICAS

Rafael Ruiz, Gabriela de Ruiz y Silvia de Marenco. Tres grandes personas abiertas, tres testigos incólumes de ese sopor alegre que padecen como destellos de estrellas, tres de todos nuestros, que saben lo que ellos para nosotros significan, lo mucho que los recordamos y el hastío de soledad que nos produce la falta de sus compañías. Tres bellas personas, tres estilos destilados en una mesa llena de música, de escosés finísimo y de estéticas de ensueño.

AMBIENTE SABROSO

Indiscutiblemente los anfitriones hacen de lo propio y de los otros cuando la alegría, el jolgorio y la felicidad explota de la forma como se hace en esta gráfica. Orlando Ruiz le hace notar a Alfredo González -Rubio de que hay Sello Negro para rato, a pesar de que la fiesta apenas empieza y el sonrojo de los cachetes se hacía demasiado evidente. Entonces que es la felicidad? una orquesta que burbujea al fondo, pasos de bailes de mariposas amarillas, una charla de los comensales en lijero albedrío y el goce irresoluto de estos anfitriones disputándose las dichas impostergables.

LAS CUÑIS

Ana Maria Toledo de Hillenbrand y Johanna Hillenbrand de Ruiz. Ninguna de las dos improvisan tanta belleza muy a pesar que una escucha atenta y la otra termina el chiste.

APRIETA SITUACIÓN, APRIETA...

Cuando el pan falta a la mesa, aprieta situación, aprieta...
Cuando no hay como pagar los servicios, aprieta situación, aprieta
Si a esto le agregas la falta de empleo, aprieta situación, aprieta
Sino pregúntenle a Elsita quien con su sobrino analizan esa situación
Sino pregúntenle a todos los demás...
Aprieta situación, que el baile no tiene condición.

LAS DAMAS DE ROJO

Las damas de rojo (Gabriela Ospina de Ruiz y Zoraida Royo de Hillenbrand), cada vez que se juntaban, a las luces les daba pena alumbrar a causa del destello natural e inmarcesible, que inocentemente irradiaban. No era sólo el color, sino lo que va por dentro con esa algarabía plural. Por eso posaron acá no para hacerlas notorias, sino para que nos inunden con sus mensajes, con sus dones de madres, que ellas como ponientes de cepas generacionales, saben hasta el hastío expresar.

LA DESCENDENCIA RUIZ

Alabados sean ellos que decidieron postularse de esta manera a la posteridad sin equivocarse siquiera un gramo. Miren al Padre Rafael Ruiz, destilando alegrías por todos sus poros, detallen a Orlando Ruiz Ospina, hijo quien sin estupor alguno conoce desde ya la certeza del pronto devenir y vean a Orlandito Ruiz Hillenbrand, nieto, arropado por manos seguras, curtidas en las labores de la vida, sin ninguna clase de resquemores.

UNA MESA ESPECIAL

Gabriela Ospina de Ruiz descolla y rutila, con ese rojo de fuego al asecho, Silvia Boekhoudt de Marenco muestra en forma arrebatadora su sapiencia natural con una mirada escudriñante, Rita de Rodríquez pontifica la misma con esa sonrisa natural que acusa el buen recibo de las buenas nuevas. Tatiana Marenco modela la misma con un porte trigueño que no deja lugar a dudas de su belleza. Los hombres eso sí, sonrien pero celosos. Cuidao!!!

MARTHA VARGAS Vda. de CAJAR Y MARY KATHY CAJAR

Matha Vargas de Cajar y su hija Mary Kathy nos honran con esta presencia engalanadora propias de ellas mismas. Las damas de rojo al fondo, irradian a rabiar y protegen la inteligencia indiscutible de Ericka Johanna. Unos padres ebulliendo jolgorio flanquean la foto y hacia el centro, un poco a la izquierda, Elsa Gozález-Rubio no hace más que inundarnos con esa risa dicharachera y con su porte de cartagenera elegante y pomposa.

LOS PAJECITOS LLEGAN A LA CITA

Los pajecitos llegan a la iglesia. Ellos en sus inocencias despabiladas, le dan una bendición oficial, de la más pura sepa a esta unión indestructible. Siempre es grato este anuncio porque precisamente son ellos que con esta propuesta muestran el camino de los hijos venideros. Los pajes traen el oro en los anillos, pero más que todo entregan su fervorosa algría para que la unión siga prosiguiendo en el devenir de la vida. El "Mono" Puente, hace caso oficioso a la protocolidad del evento.

LA NOVIA LLEGANDO...

Haciendo su arribo a la iglesia de la Inmaculada Concepción luce hermosa y prodigiosa en sus atuendos de encajes finos y cortes sutiles, Johanna Covas. Detrás de ella se nota el drama de las damas consortes de forma tal que el vestido no sufra ni molestias y menos gripa por el trajín que le espera. Joha se muestra fabulosa a la cita, las flores le pronostican júbilos y felicidades inconmensurables y su decisión no tiene precedentes de clase alguna.

LOS PADRES DE LOS NOVIOS

Los padres de los novios en mutua comunión (de Izquierda a derecha: Zoraida Royo, Nubia Guzmán, Hans Hillenbrand y Carlos Covas). La esperanza es de todos y por tanto, estamos inscritos en el discurrir de la vida. Es que es una verdad de a puño, cuando nos casamos no lo hacemos solamente con la novia, porque vamos agarrados de las manos con los padres, los hijos, los cuñados, los tíos y en fin, con todos. Que la unión no sea sólo un vínculo plano, sino que sea el cemento que peque y fortifique nuestras relaciones.

ANA MARIA TOLEDO Y ORLANDO DANIEL RUIZ

Ana María Toledo (esposa de Gunther Hillenbrand) Y Orlando Daniel, el hijo de Johanna Hillenbrand y Orlando Ruiz, se muestran dichosos de la vida cerca a la entrada principal del salón de festividades y cocteles del prestigioso, Hotel del Prado de Barranquilla. La alegría es espontánea y por supuesto, diversa y acaparadora en todo el derredor.

SIMPLEMENTE LOS HILLENBRAND

Acá se notan los miembros de la prestigiosa familia Hillenbrand Royo, agrupados en torno de sus nueras y yernos; llenos de mucho prestigio ético, con lo suficiente en los bolsillos y muchísimo amor entre ellos. No faltarán por tanto, algunos pensadores que extrapolen que lo de ellos les viene del cielo; es posible que cierto no sea pero tampoco se aleja de la realidad. Muchas felicidades vivas para todos ellos!!!

LOS RUIZES HILLENBRAND EN FORMA INDISCUTIBLE

Los Ruizes Hillenbrand en todo su furor; no hay nada más que agregar, si quieren, ahí les propongo una medida de felicidad que sea proporcional a la amplitud de la sonrisa de Orlando, el Padre, quien pareciera no caber de gozo en el traje de fiesta. A simple vista a ninguno les falta razones para quedar sin extasías y menos, sin dejar a dudas, todo lo demás que está por venir. Joha ilumina el ambiente con su luz propia de madre excelente. Los hijos formales, con unas caras de buena gente que esconde esa picardía natural y en fin, bañados en una unión envidiada hasta por los cielos de los cielos.

LOS MARENCO HILLENBRAND EN EL CANADÁ

A continuación, se presenta un resumen de eventos importantes en la historia de los Marenco Hillenbrand en el Canadá y todo lo que sucede alrededor de ellos.